Jaime Castillo apunta que el retorno del venezolano será una inyección importante para el equipo que viene de cinco caídas en línea en la Liga Nacional de Básquetbol.
Fotografía: Liga DIRECTV/Agencia Uno
Mucha ventaja dio Tinguiririca San Fernando en la zona pintada durante largas fechas en esta Liga Nacional de Básquetbol. Porque si bien desde la llegada de Jaime Castillo como técnico pudieron encontrar soluciones y ganar juegos contra rivales fuertes como Deportivo Valdivia y Osorno Básquetbol, las últimas semanas dejaron en evidencia el problema de estatura que terminó, entre otras situaciones, encadenándoles cinco derrotas en línea.De ahí las grandes esperanzas fijadas en el regreso del pivote venezolano José Juan Bravo, quien previo al arribo del actual DT tuvo que entrar a la lista de lesionados a partir de la jornada siete. El llanero es la gran novedad en el plantel energético para recibir este sábado a Universidad de Concepción y domingo a Municipal Español de Talca, por las fechas 21 y 22 de la fase regular.
Jaime Castillo, quien se reunía ayer con el ex seleccionado cestero vinotinto, habló sobre la importancia de tener un segundo jugador en la plantilla que maneje la zona pintada. “José nos dará más centímetros en la pintura, más presencia, más defensa y también es un jugador que nos puede aportar en el ataque”, aludió.
El DT agregó que “este fin de semana nos tocan dos equipos muy fuertes, pero también sabemos que contamos ahora con Bravo que nos puede dar una mano para poder ser más competitivos”.
En esa seguidilla de tres partidos contra Municipal Puente Alto y la reciente pasada en la Isla Grande de Chiloé, ante ABA Ancud y Deportes Ancud, quedó en evidencia cuánto hacía falta otro hombre alto para sumarse al argentino Juan Abeiro.
“Juan y Matías (Moraga) terminaban desgastados y no nos alcanzaba para finalizar siendo competitivos en el último cuarto”, apuntó Jaime Castillo, quien con esta movida vio partir desde su plantilla al base venezolano José Cruz.
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